Debe tenerse en cuenta que la persona afectada de disfagia suele presentar a menudo una pérdida de apetito, por lo que la ingesta de fluidos puede plantearse administrando el 75-80% DE LAS NECESIDADES DE LÍQUIDOS DIARIOS FUERA DE LAS COMIDAS.
- En casa: Puede utilizar vasos de diferentes colores y tamaños con el fin de hacer más agradable el acto de beber y motivar la ingesta e hidratación. Recuerde espesar siempre todas las bebidas o utilizar aguas gelificadas listas para su uso. Una recomendación, las bebidas frías estimulan el reflejo deglutorio y facilitan la deglución.
- Fuera del domicilio: Dispone de bebidas de textura modificada listas para su consumo como son las aguas gelificadas, que no requieren frio y que mantienen siempre su viscosidad. Una manera sencilla y fácil de hidratarse.
Además el consumo de cualquier bebida administrada en pequeñas cantidades, como por ejemplo con la ayuda de una cucharita de postre, favorece la formación del bolo con mayor facilidad y disminuye el riesgo de complicaciones.